A veces te encuentras en la situación de tener una bicicleta que tiene unos cuantos años y que ha perdido el brillo imponente de sus componentes cromados debido al paso del tiempo, suciedad incrustada o incluso oxido dependiendo del material con el que estén fabricados.
Concretamente tengo en mi poder una bicicleta Sunn 4003R del año 95 con cuadro de hierro cromado. Sin duda, una de las Sunn más bonitas de aquella epoca.
Parada y estancada en el olvido del uso me decidí a darle un lavado de cara.
Despues de lavar y desengrasar la bici para quitarle la capa de suciedad que tanto tiempo llevaba incrustada en el cromado (agua, jabon y KH7 de la cocina…), desmonté la mayoria de sus componentes y deje el cuadro casi al desnudo para poder acceder a todos los rincones.
Existen productos en el mercado e incluso trucos caseros populares, pero yo me decidí a usar algo que me funcionó en la restauracion de una bici de carretera y que conlleva un gasto de menos de 5€ en cualquier suministro industrial o ferreteria.
Solo necesité lana de acero, frotando con pequeños trozos sin ejercer fuerza practicamente para ir levantando el oxido y volver a darle ese brillo con el que se recordaba. Es tan facil como simple.
(se ve la diferencia entre la parte pulida y la que no lo está)
Con paciencia «pulí» todo el cuadro sin utilizar ninguna otra cosa que la lana, aunque barajé la posibilidad del papel de aluminio.
El resultado de la restauración fué muy satisfactorio y a la vista está.
La bicicleta vuelve a brillar como cuando llegó a casa.
Para un futuro post, prepararé el antes y el después de un proyecto parecido con una bici del año 77.
Gracias por leerme!
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